¡Comenzó el programa «Picapinos»!

El pasado lunes 30 de enero, a caballo entre el Día Mundial de la Educación Ambiental (28 de enero) y el Día Mundial de los Humedales (2 de febrero), tuvo lugar en las riberas del Duero en la ciudad de Zamora la primera actividad de este programa de divulgación de la Biodiversidad local dirigido a alumnos y docentes de centros educativos del municipio.

Los primeros partipantes fueron un grupo de alumnos y profesoras del IES «Universidad Laboral» a los que tuvimos el placer de introducir al conocimiento de la sorprendente y variada avifauna de nuestro magnífico humedal urbano.

Juntos descubrimos los secretos de la vida de cormoranes, garzas, martinetes y somormujos, protagonistas que pudimos observar estupendamente con nuestros telescopios. Unas imágenes que sin duda quedarán grabadas para siempre en sus retinas y contribuirán a desarrollar en ellos el interés y el deseo de conservar estas especies y su hábitat.

«Picapinos» está teniendo una gran acogida y una demanda muy elevada (varias veces mayor de la prevista) por lo que estamos realizando un gran esfuerzo para atender todas las peticiones de partipación que recibimos. Si deseas informarte y solicitar participar con tus alumnos en estas actividades puedes escribir a zamorabiodiversa@gmail.com o llamar al 676046551.

«Picapinos» es un programa de Educación Ambiental promovido por la Concejalía de Hábitat Sostenible del Ayuntamiento de Zamora y desarrollado con la colaboración de «Saliegos Birding» y «Zamora BioDiversa».

Dormilones de día, brujas de noche

Uno de los aspectos más característicos del comportamiento del martinete común (Nycticorax nycticorax) es su actividad fundamentalmente nocturna, especialmente fuera del período reproductor. Este patrón ha dado lugar a algunos nombres vernáculos de los numerosos que reciben estas misteriosas ardeidas a lo largo y ancho de su extensísima área de distribución que abarca gran parte de los continentes euroasiático, africano y americano.  Así, en Argentina y en Andalucía es conocido como garza bruja, en gallego se denomina garza da noite y en catalán martinet de nit.

También su denominación científica, nycticorax (“cuervo nocturno” en griego), hace clara referencia a sus hábitos noctámbulos. Durante el otoño y el invierno, los martinetes que no han emigrado hacia el sur -lo habitual en su especie- se agrupan en dormideros comunales donde descansan durante el día, tratando de permanecer a salvo de sus depredadores: aves rapaces y mamíferos carnívoros, sobre todo. 

 Al caer las tinieblas, vuelan siguiendo el curso del río en dirección a sus áreas de pesca, ubicadas con frecuencia a varios kilómetros de distancia del dormidero. En la oscuridad, los distintos individuos del grupo se comunican entre sí emitiendo una voz característica: «guac-guac». Este sonoro reclamo también ha inspirado una cantidad considerable de vernáculos, tales como guaco o huaco en Perú, Colombia, Venezuela y México, kwak en neeerlandés y goraz en portugués europeo.

En Brasil, en cambio, se conocen como dorminhocos, haciendo referencia a sus hábitos de descanso diurno. Curiosamente, dormilones es uno de los dos nombres populares recogidos en Zamora. El otro, mediagarza, probablemente se refiera a sus dimensiones corporales, francamente menores que las de otras especies de la misma familia como la garza real (Ardea cinerea), con la que suele coincidir, incluso en las colonias de cría.